Por favor, use este identificador para citar o enlazar este ítem: https://repositorio.uca.edu.ar/handle/123456789/14312
Título : El maestro según Santo Tomás
Autor : Derisi, Octavio Nicolás 
Palabras clave : Tomás de Aquino, Santo, 1225-1274MAESTROEDUCACION
Fecha de publicación : 1977
Editorial : Pontificia Universidad Católica Argentina. Facultad de Filosofía y Letras
Cita : Derisi, O. N. El maestro según Santo Tomás [en línea]. Sapientia. 1977, 32 (126). Disponible en: https://repositorio.uca.edu.ar/handle/123456789/14312
Resumen : Posiciones antagónicas frente al problema del aprendizaje: En la Cuestión XI de las Cuestiones Disputadas, Santo Tomás trata de resolver en qué consiste la acción docente y el maestro que la imparte. El primer artículo, el más largo e importante, ofrece la doctrina fundamental sobre el tema. Con su habitual claridad el Santo Doctor comienza por distinguir tres posiciones sobre el modo cómo una forma puede establecerse en un ser. Y lo hace refiriéndose: a) tanto al plano sensible; b) como al moral y c) científico, en el sentido filosófico de esta palabra, es decir, conocimiento por las causas. La primera posición sostiene que toda forma, en los tres planos nombrados, proviene del exterior, es decir, que el sujeto las recibe de un modo pasivo. Así en el orden de las formas o conocimientos sensibles y en los intelectuales, el entendimiento agente separado y único —como lo concibe Averroes y los averroístas latinos de la Edad media como Siger de Brabante— sería lo que produce tales formas en los sentidos y en el entendimiento sin la colaboración o actividad de éstos. Otro tanto sucede con la virtud. Lejos de ser ella efecto de un ejercicio de la propia actividad libre, encauzada al bien, resulta en la voluntad por una comunicación de un ser superior. La segunda, posición se coloca en el otro extremo. Las formas sensibles, la ciencia con sus ideas y principios y la virtud preexisten formalmente en el sujeto. El agente exterior sólo ayuda a su manifestación. Así el agente material externo limpia el exterior que encubre las formas, ya preexistente en el sujeto. Otro tanto sucede con las ideas y principios, formalmente preexistentes en el alma, y que los agentes exteriores sólo los despiertan de su sueño y hacen que el alma los evoque y recuerde (Plafón). No de otro modo el alma está en posesión de la virtud, y el agente exterior solamente las ayuda a prorrumpir en acto...
URI : https://repositorio.uca.edu.ar/handle/123456789/14312
ISSN : 0036-4703
Disciplina: FILOSOFIA
Derechos: Acceso abierto
Aparece en las colecciones: Artículos
SAP - 1977 Vol XXXII nro. 126

Ficheros en este ítem:
Fichero Descripción Tamaño Formato
maestro-segun-santo-tomas.pdf155,86 kBAdobe PDFVista previa
Visualizar/Abrir
Mostrar el registro Dublin Core completo del ítem

Visualizaciones de página(s)

74
comprobado en 18-abr-2024

Descarga(s)

102
comprobado en 18-abr-2024

Google ScholarTM

Consultar



Este ítem está sujeto a una licencia Creative Commons Licencia Creative Commons Creative Commons